OCT 232018 Puso como ejemplo la ciudad de Morelia donde a pesar de conocerse el riesgo que implican algunas zonas específicas de la ciudad, muchas leyes, reglamentos y normas específicas se hacen desde los escritorios sin considerar las observaciones y opiniones de los expertos en materia de desarrollo urbano, equipamiento hidráulico, sismicidad, ingeniería civil y de otras disciplinas. Específicamente habló de la delimitación de zonas aptas para el desarrollo urbano (viviendas y equipamiento) en los planes de desarrollo urbano, que no siempre responde a la realidad pues se autorizan en zonas de recarga de acuíferos, en canales de desagüe natural, en barrancas, humedales, márgenes de ríos y drenes, laderas inestables, áreas de fallas geológicas, etc. Esto, al cabo, es un riesgo innecesario para las personas, como pasa en Morelia. Cristina Portillo aseveró que es una pena que por errores u omisiones en el diseño de algunas leyes locales y planes de desarrollo urbano, se presenten sucesos como las recientes inundaciones de la capital michoacana, que son perfectamente evitables, pues lo único que hay que hacer es conocer en campo la dinámica de los elementos naturales como el agua, tierra y aire para saber dónde es imposible construir una vivienda o una vialidad y dónde sí se puede. Estos episodios nos deben alertar a las y los legisladores locales michoacanos para reconocer la importancia de nuestra labor y evitar los errores del pasado, sentenció. |