
MAY 212018 Al ser esta estrategia nacional una guía o esquema intersectorial de gran alcance, la cual tiene por objetivo reducir el número de embarazos en adolescentes en México, con absoluto respeto a los derechos humanos, particularmente los derechos sexuales y reproductivos, en el ámbito estatal, se llevan a cabo acciones puntuales en la materia con la participación de instancias federales, estatales y municipales. Los objetivos generales se centran en disminuir a cero los embarazos en niñas de 10 a 14 años y reducir en un 50 por ciento la tasa específica de fecundidad de las adolescentes de 15 a 19 años para el año 2030. Para lograr estas metas y a partir de intensas reuniones de trabajo interinstitucionales y multidisciplinarias, se han establecido seis componentes o subtemas, en los cuales se centran los esfuerzos y líneas de acción; educación integral, educación sexual, oportunidades laborales y acordes a sus capacidades, entorno legal e institucional, servicios de salud amigables y prevención y atención al abuso sexual. Para este fin, se instaló el grupo estatal de trabajo GEPEA; en el que participan distintas dependencias de la administración pública estatal tales como la Secretaría de Salud, la Secretaría de Educación, la Secretaría de Igualdad Sustantiva y Desarrollo de las Mujeres Michoacanas, la Secretaría de Desarrollo Social, el Sistema DIF estatal, el Instituto de la Juventud Michoacana, el Sistema Estatal de Protección Integral de Niñas, Niños y Adolescentes (SIPINNA), además de instituciones de educación media superior, todas ellas con el Coespo como instancia coordinadora. La falta de oportunidades o de proyecto de vida, para las y los jóvenes, donde la única opción, porque así ha sido de manera tradicional en su entorno y en su comunidad, es casarse y tener hijos es parte de lo que mueve a esta iniciativa gubernamental, de ahí que el Gobierno del Estado, como institución rectora, debe coadyuvar en la construcción de proyectos de vida para las niñas, niños y jóvenes. La problemática del embarazo a temprana edad, con un diagnóstico en el que intervienen distintos factores, requiere una atención transversal, integral y coordinada, pero sobre todo, que cuente con el respaldo social, particularmente la participación activa de los niños y adolescentes. Precisamente en este tema es donde la difusión de los medios de comunicación se vuelve fundamental, pues mediante esta vía se logra una penetración y cubertura de masas más amplia y es través de ellos, que los jóvenes y la población en general se mantienen informados sobre los temas de actualidad. Adicionalmente a la proyección de esta campaña de concientización y prevención se prevé dar continuidad a la celebración de foros masivos, donde las y los jóvenes reciban información sobre las causas y efectos del embarazo adolescente, así como conocer de manera directa, las diferentes alternativas con las que cuentan para prevenirlo y encontrar una nueva visión del futuro. |