
DIC 022025 El frío y la baja humedad ambiental provocan que la piel pierda su hidratación natural, lo que puede derivar en resequedad, labios partidos o agrietados, y la aparición de grietas dolorosas en manos y pies. La SSM destaca que una piel bien cuidada reduce el riesgo de infecciones, por ello es importante aplicar cremas y lociones humectantes diariamente, especialmente después del baño y antes de exponerse al frío. Es recomendable usar productos sin fragancias para pieles sensibles. Aunado a ello, se recomienda utilizar guantes y bufandas para proteger las manos y el rostro, zonas especialmente expuestas al viento. Para proteger los labios, deben aplicarse bálsamos varias veces al día, incluso cuando se está en interiores. A la hora del baño, se recomienda evitar duchas excesivamente largas y con agua muy caliente, ya que esto elimina los aceites naturales de la piel, y usar jabones neutros o suaves. Consumir suficiente agua a lo largo del día ayuda a mantener la elasticidad de la piel. La SSM reitera el compromiso de promover el autocuidado y exhorta a la población a seguir estas recomendaciones para disfrutar de un invierno saludable. |