
JUL 062016 "El mensaje es muy simple: Se vale soñar en grande, siempre y cuando estemos dispuestos a poner estudio, esfuerzo y preparación", señaló José Hernández, el primer astronauta michoacano en entrar a la NASA, la agencia espacial más importante del mundo. Durante la conferencia que ofreció este miércoles ante un auditorio lleno de niños y jóvenes de diversas instituciones educativas de la entidad, motivó a los estudiantes a luchar por sus metas. En 45 minutos, el Ingeniero Eléctrico egresado de la universidad de Santa Bárbara, en California, detalló las lecciones más importantes que marcaron su vida y lo impulsaron a convertirse en el décimo primer latino en viajar al espacio. Contó un poco de su vida y el por qué su familia era inmigrante. Nueve meses al año vivía en California, el resto del año en la que considera su tierra, un pequeño poblado de La Piedad, Michoacán, llamado Ticuitaco, debido a que su familia buscaba mejores oportunidades, por lo que trabajaban en los campos de fresa y uva californianos. Relató que, cuando decidió ser astronauta, su padre le dio una ?receta' de seis puntos que consistía en lo siguiente: decidir qué quieres ser en la vida, reconocer qué tan lejos estás de la meta, hacer un mapa de dónde estás y a dónde quieres llegar, estudiar y prepararte, esforzarse por lograr el objetivo y entregar más de lo que la gente espera de ti. Tres veces en la lista de finalistas, mencionó que perseveró por no darse por vencido y en 2004, logró viajar al espacio. "Y desde entonces no he visto hacia atrás, sino adelante a mi meta. Yo le agregaría otro ingrediente que es la perseverancia, no darnos por vencidos. Muchas veces nosotros somos nuestros propios enemigos, nos damos por vencidos después de fallar una y otra vez. Yo estoy aquí para decirles que si lo quieren, luchen por lo que quieran. La NASA me rechazó no una, sino 11 veces. No fue hasta la doceava vez que finalmente logré ingresarme como parte de la generación 19 de astronautas", comentó. |