DIC 142015 El reto consistió en aterrizar un CanSat (satélite miniatura) en una diana de 1.5 metros de radio, luego de desplazarse a una altura de 100 metros, bajo ciertas restricciones, marcadas en la convocatoria. El proyecto se basó en el uso de un parapente, controlado por los frenos mediante dos servomotores, que ayudó a amortiguar la caída de esa altura. Usaron un microcontrolador, un GPS y sensores. El equipo pony desarrolló un programa que obtenía las lecturas de los sensores y del GPS; mediante un cálculo se podía saber hacia dónde era el desplazamiento, esto era, ajustando los servomotores para que estos tuvieran efecto sobre el parapente. Para lograr el reconocimiento mencionado, el equipo de alumnos del ITM, inició su participación en el mes de agosto, ya que el evento se realiza durante un semestre, en este caso agosto-diciembre 2015; compitieron contra equipos de diferentes centros de educación superior, de diferentes puntos del país, como la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), el Instituto Politécnico Nacional (IPN), Universidad Autónoma de Querétaro (UAQ), entre otras. El reto se llevó a cabo en cuatro pasos: el primero es la propuesta del proyecto, en el cual se envía en forma de reporte; el segundo un reporte del proyecto con las especificaciones especiales, marcadas en la convocatoria; posteriormente se presenta la estructura general del proyecto; y como último paso se presenta una publicación y un video, con exposición del mismo. El mencionado reto se llevó a como actividad de sustento para los objetivos marcados por la AEM como es el propiciar la generación de ideas creativas e innovadoras mediante el uso de la tecnología espacial para solucionar retos que está enfrentando el gobierno, la industria y la academia del país; así como el reconocer la capacidad creativa e innovadora de temas espaciales de los estudiantes mexicanos de distintas disciplinas de educación superior. |